lunes, 7 de junio de 2010

EL ESTOCOLMO; LOS MEJORES PERRITOS CALIENTES DE MADRID CAPITAL



En la calle de La Palma, en el moderno y lleno de locales interesantes Barrio de Malasaña, casi cortando con la calle Amaniel, paralela a la calle Conde Duque, una de mis zonas preferidas actualmente para salir por la noche, se encuentra El Estocolmo: un bar de copas donde poder cenar, tomar unas cervezas ó un cocktail y disfrutar del ambiente cosmopolita y la música chill-out electrónica ó algunos de los músicos indies más relevantes.
El estocolmo es un bar pequeñito y recogido, a penas llama la atención cuando pasas por delante de él. Por encima de su nombre, referente de la modernidad de una de las capitales europeas más avanzadas. El sitio posee la estética retro y descuidada made in Malasaña. A penas hay cinco ó seis taburetes altos donde sentarse. Sus paredes ocre chillón están llenas de cuadros vanguardistas ó exposiciones de fotografía en blanco y negro. En la esquina, al lado de la puerta, un pincha anima las sesiones de tarde-noche de los fines de semana. Música electrónica de vanguardia ó artistas de culto como Paul Weller ó Fatboy Slim. En esa misma esquina, por encima de el pincha, una televisión de LCD nos muestra ininterrumpidamente reproducciones de las series de dibujos japonesas que han marcado nuestra infancia, como Mazinger-Z ó La Bola de Dragón. A veces, también algunas películas Manga como Akira, que con el tiempo han adquirido la categoría de mito.

Mazinger-Z es un icono de este local, de hecho una figura suya flota como una marioneta colgada del techo, lo que nos habla sobre el carácter freak y underground de este bar con atmósfera. Un sitio con un buen equilibrio de luces cálidas e indirectas.
Al final del local se encuentran la barra y los baños. Junto a la barra, por encima de la entrada a los baños, unas pizarras nos muestran su oferta gastronómica.  Perritos Calientes, Pitas y Frikadelas por menos de 4 euros. Sin duda, a destacar son los perritos. Para mi, los mejores, con permiso de Nebraska, que he probado en Madrid a la espera de probarlos en otros sitios como El Lolinas Vintage Cafe, también en Malasaña-Espíritu Santo- ó los del Peggie Sue, muy cerquita de allí, en la calle Amaniel, la primera perpendicular en dirección Plaza de España.

Los dos que suelo pedir son el Olof, con Salchicha Blanca, y el Gran Danesa, con salchicha Frankfurt tradicional. Ambos generosos, con el bollo de pan tostado y calentito, ni muy blando ni muy compacto. Con el queso fundido a elegir, pero todos ellos con una deliciosa y suave Mostaza, aunque con cuerpo. Un poco de fino Ketchup acompaña a los dos ingredientes que ensalzan este exquisito bocado: la remolacha, una rica hortaliza, que da el punto dulce y fresco y potencia el también dulce  sabor del Ketchup, y la cebolla caramelizada, que aporta una explosión de sabor en su mezcla con el resto de ingredientes.Crujiente, entre dulce y salada y de rica textura.
Las salchichas son generosas y muy ricas de sabor, cocidas al estilo tradicional alemán y al punto justo de plancha. En definitiva, todo un manjar del Fast Food ó del Take Away.
Ideal  para tomar en un sitio con estilo como éste. Una vez más, el fast food bien hecho, además de un suculento y delicioso plato, posee esa estética y connotación de estilo que tanto y tan bien ha sabido exportar el cine americano hasta convertirlo en una seña de identidad frente al resto del mundo.

Para el recuerdo quedan algunas de las escenas más memorables del cine de los últimos veinte años, en las que la comida rápida americana ha tenido un protagonismo estelar: escena inicial de Pulp Fiction sobre las hamburguesas ó la cena de John Travolta y Uma Thurman, de nuevo de Pulp Fiction, en el café de las estrellas de Hollywood, escenas en los dinners americanos de Regreso Al Futuro y Peggie Sue Se Casó ó muchos de los capítulos de Los Soprano y Twin Peaks.

En todas ellas el fast food no pasa desapercibido. Sirve de liturgia, acompañamiento y algunas veces desata pasiones entre los protagonistas: ¡como olvidar la discusión entre Samuel L. Jackson y John Travolta sobre si el Cuarto de Libra del McDonalds en Estados Unidos ha de llevar Mayonesa como en Francia!

Os dejo unas cuantas imágenes del Estocolmo y, como no, arriba una de uno de sus exquisitos perritos.








5 comentarios:

  1. Pues tal y como lo pintas... será parada obligatoría cuando vuelva por alli :)

    ResponderEliminar
  2. A tí prima guapa que te gusta el arte, la fotografía y espero que los perritos...jaja. Te viene que ni pintao! ;-)

    ResponderEliminar
  3. Insisto en que los mejores siguen siendo los de Nebraskaaaaaaaaaa!!!

    Yumyum...

    ResponderEliminar
  4. Pero podrías probar estos Lord Garitus y después dar tu experimentada opinión.

    ResponderEliminar
  5. Saludos Magnun!!!! (y)

    ResponderEliminar